Acapulco ya se mueve; transportistas hacen su agosto

Noviembre 9 del 2023.- A 14 días del paso del huracán Otis por el puerto, poco a poco la ciudad se está reactivando, los negocios están comenzando a abrir, las gasolinerías funcionan y ya hay lugares dónde comprar alimentos y conseguir agua para tomar.

Los mercados de las colonias ya están funcionando, vendiendo alimentos, los vendedores de bolillos ya recorren las colonias ofreciendo pan.

Algunas ferreterías y casas de venta de materiales para construcción ya están atendiendo a la gente.

En las colonias, las tortillerías ya están trabajando, aunque en muchos lugares el precio de la tortilla se cotiza  a 30 pesos, en otros a 40 pesos y el precio máximo es de 50 pesos el kilo, con el pretexto de la contingencia que se enfrenta en el puerto.

Otro sector que se está aprovechando de la situación es el del transporte; los pocos camiones urbanos que están circulando cobran 15 pesos, cuando la tarifa oficial es de 11 pesos.

Lo mismo sucede con los taxis colectivos, cuya tarifa oficial es de 25 pesos y están cobrando hasta 50 pesos. Los taxis normales están cobrando un sobreprecio en la tarifa de 25 pesos extra por dejada. Los transportistas están haciendo su agosto en pleno mes de noviembre.

Los negocios de comida poco a poco están abriendo sus puertas; increíblemente, lo que más abunda en estos momentos son los tacos al pastor en casi todas las colonias; el precio de cada taco es de 25 pesos y el kilo de carne al pastor, con sus tortillas, se cotiza en 500 pesos por kilo.

La mayoría de las gasolinerías ya están funcionando, pero las de mayor afectación abrieron de manera parcial y tienen vigilancia de la Guardia Nacional.

Ya hay varios supermercados abiertos, sólo con artículos básicos de primera necesidad. Lo cual ayuda a que la gente pueda comprar lo necesario.

El Ejército y la Conagua instalaron plantas purificadoras de agua en varios puntos de la ciudad, la gente lleva su garrafón y se lo llenan.

Las principales calles están siendo limpiadas, pero ésta es una labor titánica; hay miles de pedazos de láminas metálicas tiradas por las calles; árboles destrozados. Al puerto llegaron enormes góndolas que son movidas por tractocamiones, son llenadas por montacargas y de ahí se llevan la basura a los tiraderos.

En muchas colonias utilizan los pedazos de lámina y los restos de tinacos para hacer barricadas y cerrar las calles, con el fin de evitar robos.

Los hospitales no han parado de trabajar, pero ahora su funcionamiento ya es mejor y las farmacias que se encuentran enfrente ya abrieron su venta al público.

Algunas empresas están contratando personal para limpiar sus instalaciones y repararlas, ya hay negocios abiertos y movimiento.

La ayuda está llegando muy lentamente; la Marina y el Ejército están repartiendo despensas en las colonias, muchas organizaciones civiles también lo están haciendo, así como instituciones  religiosas.

Los que se han llevado las palmas son los trabajadores de la CFE, pues están realizando una labor titánica y los acapulqueños se lo reconocen, en muchas colonias les preparan alimentos y los invitan a comer.

Limpiar Acapulco llevará mucho tiempo, pues a 15 días sólo se han logrado despejar, a medias, las tres vías importantes de la ciudad: la Costera Miguel Alemán, la avenida Cuauhtémoc y la avenida Ruiz Cortines.

El agua se llevó el corral

Luis vive en la comunidad de La Venta, un pequeño pueblo que se ubica en la entrada de Acapulco, famoso por su pan y el relleno de cerdo que preparan en el lugar.

Su casa se encuentra en la ribera del río de La Venta, pero entre el nivel del agua y su casa hay un desnivel de unos 12 metros.

La noche que llegó el huracán nos fuimos a dormir temprano, como a la 10 de la noche, el río no había crecido todavía; en el patio tenemos un espacio para criar animales, marranos y chivos, mi abuela tiene un pequeño horno de barro y los domingos prepara relleno, con la carne de cerdo o a veces barbacoa de chivo.

En la madrugada nos despertamos por el agua;  se metió a la casa, el nivel del agua del río subió más de 12 metros y alcanzó las casas de los márgenes, los animales del corral muchos se murieron y sólo alcanzamos a rescatar dos chivos y seis marranitos”, narró.

Aún faltan por censar 40 mil viviendas

De acuerdo con  cifras de las autoridades, hay mas de 190 mil viviendas con algún tipo de afectacion, de un total de 230 mil viviendas. Sólo faltan por censar 40 mil viviendas.

Se han distribuido 9 millones 52 mil litros de agua de manera gratuita por toda la ciudad, según autoridades.

Hasta este martes se han localizado mil 34 personas que no aparecian despues del 24 de octubre por el paso del huracán.

La ayuda esta fluyendo, tráileres de la Marina y de la Secretaría de la Defensa Nacional, cargados de despensas van a la periferia de Acapulco repartiendo alimentos y agua.